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12 noviembre 2007

CONFLICTO DE LAS VACACIONES EN EL TRIBUNAL DE PROTECCIÓN EN EL ESTADO MÉRIDA CONTINÚA SIN RESOLVERSE

Mérida (CDS) "En casa de herrero asador de palo" así dice el viejo refrán popular. Recordemos el caso del Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente con sede en la ciudad de Mérida Estado Mérida. El caso, como ya lo hemos denunciado en varias oportunidades que no se respetan los derechos de los trabajadores contenidos en la Ley Orgánica del Trabajo y mucho menos los postulados del vigente Contrato Colectivo de Empleados. Como recordaremos en este Tribunal no se les ha permitido a los trabajadores disfrutar de sus vacaciones reglamentarias alegando la Juez Presidente de ese Tribunal, que sí no le pasaban por escrito algún superior de ella, el derecho que tienen los trabajadores de disfrutar de sus vacaciones sencillamente no podían hacer uso de este beneficio contractual.

En efecto, por órdenes y contraórdenes de una ex-Directora de Servicios al Personal que siguiendo comentarios de pasillos generados por una Juez alojada en el Tercer piso del Palacio de Justicia, decidió vía unilateralmente, vía Circular, suspender el derecho que los trabajadores tienen de hacer uso de su periodo vacacional reglamentario. Eso hizo que el Tribunal en mención, donde se cometió la vulneración del derecho de disfrute de las vacaciones de los trabajadores, siguiera al pie de la letra dicha Circular atentando en contra de los artículos 219 y 222 de la Ley Orgánica del Trabajo y la cláusula 23, numerales 4 y 5, de la II Convención Colectiva de Empleados 2005-2007. Es insólito ver como en donde se administra justicia, sea precisamente donde se violan derechos irrenunciables a favor de los trabajadores.

No entendemos como en un Estado que se prepara para ejercer el socialismo como ideología, la administración de justicia se apunte cada vez más hacia el neoliberalismo salvaje. Hemos tratado de todas las formas posibles que esta situación se solvente y esperamos por un pronunciamiento de Asesoría Laboral que nunca llega. El tiempo se agota y a los trabajadores se les ha violado el derecho de uso, goce y disfrute de sus VACACIONES REGLAMENTARIAS. Ha sido literalmente imposible que esta situación se solvente por la vía amistosa y del acuerdo. El diálogo para nosotros los trabajadores se encuentra agotado. Sólo resta llamar a María.