En un ambiente de confraternidad y camaredería los trabajadores y trabajadoras del Juzgado Superior Primero Civil, Mercantil, del Tránsito y de Menores del estado Mérida celebró las navidades con una cena navideña. El Juez de dicho Tribunal Dr. Homero Sánchez, quien funge también como Juez Rector de la Circunscripción Judicial del Estado Mérida, agasajó a sus empleados y obreros en un conocido restaurante de la ciudad de Mérida donde compartieron amigablemente.
Esperamos que para el bien de los trabajadores y las trabajadoras del poder judicial merideño este ejemplo sirva para este año, pues es bien sabido que en algunos tribunales del Estado Mérida lo que existe son rencillas producto de la lucha de poder por ganar espacios dentro de un mismo tribunal y que algunos jefes de despacho antes de resolver las diferencias entre sus trabajadores como debería hacer cualquier jefe inmediato lo que hacen es acrecentar la diatriba entre los mismos empleados y alimentan la inquina y el odio producto de su mismas falencias personales y espirituales; hay algunos que hasta se atreven a profundizar a través del chisme y la confrontación los pocos errores que como seres humanos cometen sus empleados enterando a usuarios del tribunal sobre los pleitos internos que en nada les interesa a quienes van en búsqueda de justicia.
Esperamos que para el bien de la administración de justicia merideña este mal sea erradicado y muy pronto estaremos nuevamente cumpliendo con nuestro deber de denunciar hechos de exclusión como estos.
Esperamos que para el bien de los trabajadores y las trabajadoras del poder judicial merideño este ejemplo sirva para este año, pues es bien sabido que en algunos tribunales del Estado Mérida lo que existe son rencillas producto de la lucha de poder por ganar espacios dentro de un mismo tribunal y que algunos jefes de despacho antes de resolver las diferencias entre sus trabajadores como debería hacer cualquier jefe inmediato lo que hacen es acrecentar la diatriba entre los mismos empleados y alimentan la inquina y el odio producto de su mismas falencias personales y espirituales; hay algunos que hasta se atreven a profundizar a través del chisme y la confrontación los pocos errores que como seres humanos cometen sus empleados enterando a usuarios del tribunal sobre los pleitos internos que en nada les interesa a quienes van en búsqueda de justicia.
Esperamos que para el bien de la administración de justicia merideña este mal sea erradicado y muy pronto estaremos nuevamente cumpliendo con nuestro deber de denunciar hechos de exclusión como estos.