El padre José Palmar está decidido a no entregarse porque, argumenta, "no he hecho más que denunciar irregularidades cometidas contra el patrimonio de Venezuela". Seguidor incondicional del presidente Chávez, el sacerdote zuliano hizo de la cruzada anticorrupción –que predicó el mandatario– su credo personal, y cuando recopiló las pruebas documentadas, denunció graves hechos de corrupción en Petróleos de Venezuela, irregularidades que la comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional se comprometió a investigar pero que, pasado el tiempo, quedaron sepultadas en el olvido.
Ahora la jueza de control de Caracas, Anabel Rodríguez, le dicta medida de conducción para que el sacerdote se presente en su despacho y participe en una audiencia de conciliación con las personas que denunció por los hechos de corrupción en Petróleos de Venezuela. El mandato de conducción se refiere al traslado obligatorio por las fuerzas públicas y de forma inmediata de una persona ante el funcionario del Ministerio Público que dictó la sentencia.
Palmar confirmó la información y explicó que la jueza lo ha invitado en tres oportunidades a firmar una conciliación con las personas que él denunció, a lo cual se ha negado porque –a su juicio– las pruebas que presentó sobre los hechos de corrupción en la estatal petrolera son fehacientes. Palmar reiteró que no firmará ningún acuerdo y que las denuncias sobre presunta corrupción en la petrolera son verdad. "No voy a firmar ningún acuerdo reparatorio ni con Wilmer Ruperti, ni con Rafael Ramírez ni con Luis Vierma, ni con ninguno de los choros, pillos y ladrones de Pdvsa. Porque le hemos llevado una carretilla no de papeles sino una carretilla con evidencias, con pruebas y una serie de documentos que denotan que lo que el padre Palmar y Leocenis García han denunciado contra Pdvsa, es verdad".
Manifestó que las acciones en su contra responden a una retaliación política, por las denuncias presentadas contra Pdvsa. Para Palmar, esas denuncias han quedado "esclarecidas" con la detención de Carlos Kauffman y de Luis Marín, "que ya han hablado y expresaron muchos nombres que involucran al alto gobierno y a la dirección de Pdvsa en Venezuela". "Si yo hubiera mentido y cometido una especie de difamación e injuria agravada, yo reconozco que mentí, que las pruebas no fueron contundentes y me retracto, pero no es así y como muestra está la maleta Antonini, la carretilla de denuncias de PDVSA y las declaraciones de Luis Vierma (vicepresidente de exploración y producción de PDVSA), quien se hizo profeso y confeso de que era incurso en el delito de violar los contratos de PDVSA. ¿Cómo pretende el Poder Judicial que haga un acto de conciliación con los corruptos cuando las pruebas denotan lo contrario?", se pregunta el antiguo seguidor del presidente Chávez sin llegar a comprender que ha sido el líder mismo de la revolución bolivariana quien ha advertido a los que pretenden hacer denuncias de iregularidades dentro del proceso que "dentro de la revolución, todo; fuera de la revolución, nada".
vía Talcual digital.com