Proponen no debatir cuánto ganan en el TSJ, sino si su actuación lo justifica
Ni los más altos, pero tampoco los más bajos. Los salarios de los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) se encuentran dentro del rango latinoamericano. Así se observa al contrastar los ingresos de los 31 miembros del máximo juzgado con los de sus colegas de 13 países de la región.
En febrero pasado, los medios mexicanos informaron que los ministros de la Suprema Corte de esa nación se incrementaron sus sueldos hasta los 340 mil pesos mensuales, lo cual equivale a unos 24.000 dólares, convirtiéndose en los mejores pagados del grupo comparado.
Por su parte, los magistrados de la Corte Suprema de Perú, quienes hasta el año 2007 percibían unos 10 mil soles (3.170 dólares) se encuentran al final de la lista, la cual fue elaborada por este diario a partir de un estudio publicado por la Fundación para el Debido Proceso Legal en 2008 y de cifras suministradas por la Asociación Gremial de Empleados del Poder Judicial de Argentina y de otras publicadas en varios medios latinoamericanos en los últimos meses.
Entretanto los miembros del TSJ, con sus 30 mil bolívares fuertes, se ubican en el segundo lugar, si la comparación se realiza tomando como referencia el cambio oficial, pero si se realiza a partir del dólar permuta, pues caen hasta el puesto 12.
Un magistrado al ser consultado sobre el debate reabierto por el presidente Hugo Chávez sobre sus remuneraciones señaló: "Ciertamente en el TSJ, como en el resto del Poder Judicial, hay buenos salarios, pero esto garantiza la exclusividad y el trabajo integral. Los sueldos garantizan que un magistrado, juez o abogado no ejerza por su cuenta ni brinde asesorías".
En similares términos se pronunció un ex gerente del máximo juzgado, quien indicó que la política salarial iniciada en los años 90 ha permitido: "Reducir los riesgos de corrupción, reclutar personal de mejor nivel y, por ende, ofrecer mayor eficiencia en el trabajo".
Bonos a granel
El jefe del Estado también fustigó los bonos millonarios y sobre el particular el ex funcionario informó que los trabajadores tribunalicios, además de los tres meses y 12 días previstos en el contrato colectivo, reciben 132 días adicionales cada fin de año, lo cual totaliza ocho meses.
Sin embargo, desde el Sindicato Unitario Organizado Nacional de Trabajadores de la Administración de Justicia (Suontraj) recordaron que este año lo cobraron incompleto debido a insuficiencias presupuestarias e incumplimientos de parte de la Dirección Ejecutiva de la Magistratura (DEM).
Respecto al TSJ el ex gerente indicó que los magistrados y demás trabajadores cobran tres meses y otro bono que depende de lo que reste del presupuesto, pero negó que alguna vez ambos hayan sumado 10 meses.
Cambiar el centro del debate
La directora de Transparencia Venezuela, Mercedes de Freitas, al ser consultada sobre el asunto auguró que este nuevo debate no rendirá frutos, tal y como ocurrió hace dos años.
"No sirve para nada bajarse el sueldo sino hay controles, verificar esto y evitar que a través de bonos se compensen la reducción", afirmó, al tiempo que abogó por no continuar debatiendo sobre lo que ganan los jerarcas del Estado.
"El problema no es cuánto ganan los funcionarios, sino si se lo merecen. ¿En el TSJ hay retardo procesal o los casos se tramitan en los lapsos? La respuesta a este tipo de preguntas será lo que permitirá concluir si lo que ganan es mucho o poco", dijo, al tiempo que exigió que se publiquen los tabuladores salariales de los entes públicos.
Juan Francisco Alonso
EL UNIVERSAL
