La mañana de este jueves, la ministra para Relaciones Interiores,
Justicia y Paz, Carmen Meléndez, acompañada por la ministra del Poder
Popular para el Comercio, Isabel Delgado; el ministro de Alimentación,
Yván Bello y el vicepresidente de Seguridad y Soberanía Alimentaria,
Carlos Osorio realizaron una inspección al Abasto Bicentenario, ubicado
en Plaza Venezuela, desde donde hicieron un llamado a la
población para que acudiera con total normalidad a adquirir los
productos de la cesta básica pues los estantes estaban “full”.
La mentira del régimen:
Meléndez hizo un llamado a la comunidad para que mantenga “la calma y la paciencia”. “Que dejen la desesperación, tenemos la capacidad y productos para todos, con paciencia y calma” pues aseguró: “los anaqueles están full”.
Desde las instalaciones del establecimiento comercial, la también vicepresidenta de Soberanía Política, Seguridad y Paz, precisó que “estamos brindando seguridad a nuestro pueblo que vino a hacer sus compras”.
El ministro Carlos Osorio aseguró que para el año 2015 tienen
prevista la distribución de más de 6 millones de toneladas de alimentos
de la cesta básica, entre estos: leche, arroz, harina, pollo, carne y
café.
“Aquí hay un gobierno dedicado las 24 horas del día a garantizar la
seguridad alimentaria de nuestro pueblo. Estamos activando todos los
mecanismos para asegurar la distribución efectiva de los alimentos”,
enfatizó.
¿Todo parece muy bonito no? Bueno, al menos así se vio en las cámaras de VTV.
Ahora vamos con la verdad:
Usuarios de la red social Twitter confirmaron la presencia del
Ministro de Alimentación, Yvan Bello, Vicepresidente de Seguridad y
Soberanía Alimentaria, Carlos Osorio, Isabel Delgado y la Ministra de
Interior y Justicia, Carmen Meléndez, dentro del Abasto Bicentenario de
Plaza Venezuela, donde se reportan además largas colas desde tempranas
horas de la madrugada de este jueves. Se cree que los funcionarios
visitaban el supermercado de la red nacional como parte de una
supervisión rutinaria televisada, pero se encontraron con una fuerte
dosis de realidad. Cuando trabajadores del supermercado abastecieron las
vacías neveras con pollos, la multitud de compradores enloqueció (sin
importar la presencia de los ministros) y la situación culminó en caos, empujones y desesperación por alcanzar a comprar el escaso alimento.
Recientemente, el ministro Yvan Bello fue objetivo de gran polémica
al asegurar que era una exageración hablar de largas colas y
desesperación para comprar alimentos en el país. Parece que los
ministros se toparon con un buena dosis de realidad. ¡Vaya momento
épico!
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